Nuestra propuesta se basa en el “Code of Practice on Disinformation” en 2018, y su refuerzo en 2022. Basándonos en estas premisas y las recomendaciones de los informes del Centro de Transparencia, hemos encontrado diversos ámbitos donde la UE debe expandir su campo de acción.
Proponemos la creación de un programa de fact-checking propio de la Unión Europea, que tenga su propia etiqueta y garantía europea, el “EU-Check”. Debe proporcionar información sobre la veracidad de la información de las redes sociales, y proporcionar una plataforma para presentar dudas y enviar artículos o publicaciones para obtener una verificación.
El informe destaca la necesidad de realizar avances en la gestión de las inteligencias artificiales. Proponemos que el “UE-Check” sea capaz de identificar el contenido creado con estos programas, para advertir de su riesgo con una etiqueta que lo identifique como creado por una IA.
Para abordar la desingormación sobre la guerra en Ucrania proponemos campañas educativas sobre la situación real del conflicto, herramientas para contextualizar la información a través de “EU-Check”.
A través de cursos de formación, la ciudadanía, serán formados para identificar la desinformación.
También sería importante reforzar y promover la "Ley de Servicios Digitales" y la "Ley de Mercados Digitales", con un enfoque específico contra los discursos extremistas.