Uno de los principales objetivos de la Unión Europea es reducir las desigualdades entre regiones. La provincia de León, y en particular la zona rural de la Ribera del Órbigo, sufre desde hace años problemas como la despoblación, la falta de oportunidades y un alto desempleo juvenil.
Apoyar con financiación europea a empresas locales dedicadas al cultivo y procesado del lúpulo es una oportunidad clara para impulsar la economía local, crear empleo y mantener población en el territorio. El sector del lúpulo, con larga tradición en la zona, tiene un gran potencial de crecimiento si cuenta con el apoyo necesario.
Además, esta financiación permitiría formar a jóvenes agricultores en técnicas modernas y sostenibles, fomentando la profesionalización del sector. Con programas de formación e innovación se puede mejorar la producción, aumentar el valor añadido del producto y asegurar el relevo generacional en el campo.
Este tipo de inversión encaja plenamente con los objetivos de la UE en materia de desarrollo rural, cohesión territorial y sostenibilidad.